Me vuelvo a poner al día con las críticas de las películas que voy viendo recientemente, aquellas que empiezan a sonar fuerte de cara a la temporada de premios que se avecina.
Looper (Asesino del futuro)
Nota: 8/10
Tras recibir Inception en el 2010 con las mejores vibras y convirtiéndose bajo mi humilde punto de vista en una de las mejores propuestas de ciencia ficción en los últimos años, nos llega Looper, película que ya muchos han podido disfrutar y sacar sus conclusiones.
El film trata de que en el 2072 los asesinatos están terminantemente prohibidos, por ende las víctimas son enviadas a través de una máquina del tiempo al pasado (2042), donde los Loopers, un grupo de asesinos a sueldo, se encargan de eliminarlas y deshacerse rápidamente de sus cuerpos. El problema surge cuando Joe (Gordon-Levitt), uno de los Loopers, recibe desde el futuro un encargo muy especial: eliminarse a sí mismo (Bruce Willis). Y es aquí cuando empieza "el show".
Looper es desde su inicio una odisea de espectáculo cinematográfico marcada con un inteligente guión y un sentido del ritmo notable. El film denota con atino la manera correcta de ensamblar drama, acción y por supuesto ciencia ficción al mejor estilo, una especie de ensalada que nunca sufre altibajos, y con los condimentos necesarios. Rian Johnson (el director) se encarga de compenetrarnos en esta magistral propuesta y envolvernos en el parsimonioso papel que bien interpreta Gordon-Lewitt. Una película que reboza de corazón y alma, a la que muy poco se le puede tachar. No es perfecta, es más raras son los films que pueden etiquetarse de serlo, pero su búsqueda hacia tal cometido (al menos dentro de sus objetivos) ha dado sus frutos.
Entretenimiento del bueno, y que se necesita hoy en día en la ciencia ficción.
Moonrise Kingdom
Nota 7/10
Y llega Wes Anderson con su particular estilo para entregarnos otra fábula estupenda. Esta vez nos lleva a nuestra infancia a recorrer por nuestra mente y nuestros sentimientos la aventura de dos adolescentes que dejándolo todo atrás deciden iniciar un recorrido sin retorno y embarcarse en sus "vacaciones" a su estilo. Moonrise Kingdom rememora nuestro amor adolescente (primer amor), evoca esos sentimientos de viveza, de rebeldia, de angustia, de temor que todos hemos sentido alguna vez, solo que añade valor por el hecho de presentarnos el punto de vista que todos hemos querido observar, desde la perspectiva de unos pequeños jóvenes, sin prejuicios y sin el "qué dirán", obstáculos que todos los adultos tienen. ¿Acaso no es una muestra aleccionadora de cómo romper barreras cuando se siente ese primer amor, o el amor verdadero?
El director vuelve a su inagotable (cuestionado) surrealismo que a muchos encanta y a otros fatiga, pero nunca deja indiferente, razón por la cual todos sus films están en la boca de la mayoría. Particularmente su estilo aunque lleno de magia y rebosante de originalidad, me ha resultado a ratos cansino en otras producciones, en ésta me ha parecido formidable y perfecta para el relato que nos cuenta. Técnicamente no hay nada que achacarle, la puesta en escena es perfecta, súmamente simétrica y lo que más me ha fascinado es la banda sonora que el genio de Alexandre Desplat ha compuesto, con temas que deben estar considerados para muchos reconocimientos, lo cual me parecería más que merecido. Punto extra por el reparto, gran trabajo conjunto, desde los más niños hasta actores de la talla de Frances MacDormand, Edward Norton, Bruce Willis o Bill Murray.
En fin, una película que gusta y debe "vivirse", una experiencia más que interesante.
Magic Mike
Nota: 5/10
Y Steven Soderberg, ese director que nos entregó una obra magnífica con Traffic y otra estupenda con Sexo, Mentiras y cintas de video, y que ha anunciado que hará sus últimos trabajos para dedicarse a otra cosa que ahora no recuerdo exactamente, parece haber perdido el rumbo; y lo digo porque sus últimas producciones carecen de ese "algo" que me hubiera encantado recibir en sus propuestas. Si bien Contagio me pareció una cinta interesante que traspasaba lo cotidiano en films sobre pestes mundiales, no alcanza la cuota como para decir que el viejo Soderbeg había regresado. En Magic Mike, su última producción, vuelve a bajar el pendón y es como si se encontrara resignado a realizar films de encargos más que vivir cada cinta como una nueva experiencia.
La película es de lo más normal, típica de la que poco se puede esperar, solo que le añadimos a todo el concentrado bailes, strippers, una chica sexy, y un guión descafeinado sin rozar en ningún momento algo atractivo. ¿Algo bueno que rescatar? Pues sí. Matthew McConaughey hace el papel de su carrera en esta película, interpreta al antihéroe bonachón y bohemio y logra que su personaje brille en el film, una construcción idónea. Aplausos para las coreografías, bien escenificadas. Y un final que logra resultar por lo menos, interesante. Si no la ven, no se pierden de nada; si lo hacen por el contrario podrán tener material adecuado si desean hacer de strippers en alguna ocasión.