Crítica de The Way Back (Camino a la Libertad)

Nota: 8/10

¿Cuánto ansiamos ser seres libres? ¿Esclavos? Preferimos morir siendo libres que vivir siendo prisioneros. La máxima expresión del hombre por sentir la libertad es un sentimiento que le llevará a hacer cuánto pueda y cuanto esté a su alcance. Esta es la premisa básica por la cual se construye The Way Back (Camino a la libertad) del director australiano Peter Weir, encargado de entregarnos joyas del cine como el Show de Truman, El club de los poetas muertos, Master and Commander y Único Testigo.

La historia está basada en hechos reales suscitados en Siberia durante la segunda guerra mundial. El film se centra básicamente en lo acontecido a varios de los prisioneros de guerra, que traman e idean un escape y lo consiguen, pero deberán cruzar una odisea de obstáculos para poder llegar a su destino. Comandados por Januz (Jim Sturgges), Mr. Smith (Ed Harris), Valka (Colin Farrel), y unos cuantos más que se enfrentarán a esa lucha. En el trayecto se les unirá Irena (Sarsoise Ronan), otra ex-prisionera que les ha seguido los pasos al grupo.

El film es una construcción bastante bien lograda de este viaje épico que lograron dichas personas. Sólida en su propuesta, lo cual ya es un mérito a destacar, pues no divaga en el argumento como lo hacen muchos otros film de esta clase; The way back es centrado y correcto en el recorrido que hace durante los minutos que el metraje dura. Weir arremete otra vez, mostrando su inagotable talento. Él aprovecha los magníficos escenarios para transmitir una sensación de esperanza y una impresión de que no es en vano todo por lo que se lucha. Se nos cuenta una historia muy valiente pero con aires de relajación (no por la historia en sí, más bien el cómo es tratada), sin complicaciones, aunque pareciera complicarse a ratos cuando la tensión disminuye y no se siente la misma sensación del inicio, aunque sabe mantener un ritmo bastante bueno, capaz de volver a resarcirse cuando lo debe hacer.

The way Back es una historia que inspira, es un retrato voraz e inteligente sobre la supervivencia, sobre las ansias de libertad, sobre el espíritu humano; es un film además sobre la amistad, el orgullo y a la vez también se respira la sensación de fracaso, de vacío, pero no por haber desperdiciado el tiempo mas bien una percepción causada por aquellos que quedan en el camino durante la peregrinación y que entregan su cuerpo y alma por una causa, buscando la libertad, muriendo en el intento, pero gloriándose en cierta forma al ser catalogados como ejemplos vivos, y por el simple hecho de ser retratados en un film que explora y exalta aquella heroicidad.

The Way Back se luce de una manera sobria y edificante; y aprovecha al máximo las virtudes que respira en su derredor. Todo en su conjunto es bastante notable: fotografía, edición, sonido, maquillaje y una música muy acorde. El elenco como grupo actoral es muy destacable, principalmente Farrell en un papel bastante jugoso que lo aprovecha bastante bien; Harris secunda a Farrell interpretativamente hablando, y los demás casi al mismo nivel.

Un muy bien trabajado film que paraliza en intervalos y enamora en otros. Un producción muy recomendable. No la pasen por alto.